Este proyecto, seleccionado por El Barcelona Institute of Technology del Ayuntamiento de Barcelona en el marco de la convocatoria de ayudas para proyectos de innovación urbana, tiene como objetivo garantizar y alargar la autonomía y mantener un buen estado de salud y calidad de vida de las personas mayores mejorando su alimentación.
En esta línea, Alícia, ha llevado a cabo una primera fase exploratoria basada en estrategias de participación, entendiendo que las personas se encuentran en el centro del proyecto y que este se realiza CON la gente mayor y no PARA la gente mayor. Se han realizado distintas sesiones de co-creación que han permitido conocer y entender sus urgencias y demandas en relación a una mejor alimentación, implicando a los servicios y recursos del barrio como por ejemplo los restaurantes o el Casal de gente mayor de Horta.
Una vez finalizada esta fase de diagnóstico, se ha procedido al vaciado y análisis de la información para diseñar las estrategias que mejor se adapten al barrio.
Se han dibujado tres acciones que serán las que se están empezado a implementar en el barrio durante el último trimestre del año en esta prueba piloto: un servicio de consulta i asistencia telefónica para personas y servicios del barrio, que conecta con una nutricionista especializada en cocina de Alícia; la implementación de un taller de alimentación y cocina y la puesta en marcha del proyecto de “restauración amigable”, un modelo de restauración que sea más consciente de las necesidades y realidades de las personas grandes y que les de respuestas.
Las acciones tienen un doble objetivo: por un lado, se quiere fomentar la red de barrios para garantizar una adecuada atención a las personas mayores y una mayor presencia de estas a la realidad comercial de la zona. Por otro lado, se busca capacitar, en materia de alimentación, al sector senior, entendiendo que la calidad de vida de una persona pasa necesariamente por su autonomía y por su capacidad de decisión sobre sus gestiones diarias.
Esta prueba piloto finalizará en enero del 2022, aunque no se descarta la posibilidad de transferir la experiencia adquirida y los servicios resultantes a otros barrios de Barcelona.